Acabo de recibir un email de Willy, donde comenta las últimas novedades que, por desgracia, no son demasiado buenas.
«Hola, amigos!
Hoy soy yo (willy) quien les escribe. El motivo es que he tenido que renunciar a este primer ataque a cumbre nada más llegar al campo 1. Rakel que es una bendita no ha dudado en bajar conmigo. La razón concreta, es que cuando nos situábamos sobre los 5400 metros, comencé a sentir un cansancio anormal. Ya había subido esta misma cuesta con más peso y menos aclimatación en mejores condiciones. (…)
Hoy he pasado buena noche, pero tengo todos los músculos doloridos. No sé a que se debe, y eso es lo peor. Tengo ahora muchas dudas. Me voy a dar tres o cuatro días para ver como evoluciono. Ahora que tenía que estar a tope, es cuando más cansado me siento.
Si todo va bien y las sensaciones son buenas lo intentaremos de nuevo hacia el fin de semana. Sino, habrá que tomar alguna decisión. Una sensación de rabia me invade. Nunca puede ir todo bien???
Nuestros compañeros están hoy en el campo 3, quizás mañana se encaramen a la cima. (…)
Bueno amigos, espero contaros mejores noticias la próxima vez.
Saludos.»